La granada en cosmética: promueve la síntesis del colágeno y favorece la regeneración de la piel

Cada día son más los cosméticos que cuentan con el aceite de granada en la formulación. A menudo se la llama “la fruta divina” debido a sus maravillosos beneficios nutricionales y de belleza.

Se sabe que la fruta es rica en antioxidantes y nutrientes beneficiosos para la salud y ha sido relacionado con mejoras coronarias o en enfermedades cardíacas.

La granada es rica en compuestos fenólicos y cuenta con propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias, antioxidantes y cicatrizantes, así como ayudar a la salud bucal reduciendo el desarrollo de gingivitis.

Gracias a su riqueza en antioxidantes y polifenoles, la granada ha aumentado su popularidad en la industria de la belleza natural.

Rico en vitaminas y nutrientes

La granada contiene ácido P-cumárico, ácido cafeico, ácido ferúlico, ácido elágico, ácido gálico, entre muchos otros compuestos nutritivos que trabajan juntos para promover la cicatrización de heridas y la reparación de tejidos.

Mientras tanto, la vitamina C y los fitonutrientes ayudan a que las células de la piel se regeneren.

Asimismo, el aceite de granada también es rico en vitamina K y cuenta con una gran cantidad de compuestos polifenólicos protectores como el ácido punícico, los flavonoides, las antocianidinas y los taninos.

Los polifenoles son compuestos químicos que se encuentran naturalmente en las plantas. Ofrecen cualidades protectoras, como la neutralización de los radicales libres del medio ambiente antes de que puedan causar daños en el ADN de las células de la piel.

El aceite de granada es tan rico en polifenoles que en realidad tiene la capacidad de filtrar o absorber la luz ultravioleta, protegiendo la piel de los dañinos rayos UV.

No obstante, solo con aplicarse aceite de granada no es suficiente para proporcionar a la piel una protección completa. El uso de un buen protector solar mineral es imprescindible para una correcta protección.

Beneficios para la salud y la piel

La granada sigue siendo reconocida y valorada como una fuente de alimento rica en nutrientes. Se consume por su riqueza en vitaminas, antioxidantes protectores y polifenoles y se sabe que las semillas tienen un alto contenido de fibra dietética.

La granada estimula tópicamente la producción de colágeno y elastina. Nuevamente, también puede combatir los radicales libres de la radiación UV, reduciendo así las líneas finas y las arrugas.

Por lo tanto, es una excelente opción para aquellos que buscan tener una piel de aspecto más saludable con menos signos visibles de envejecimiento.

Las granadas (o sus extractos) también están siendo reconocidas hoy en día como un nutracéutico efectivo en la industria de la salud, con beneficios documentados para pacientes con enfermedades cardíacas, cáncer y colesterol alto.

Además, la granada es aclamada como un potente antiinflamatorio debido a que contiene el compuesto CLA, ácido linoleico conjugado. La fruta o el jugo de granada se consume por sus cualidades antioxidantes, mientras que el aceite de semilla se puede aplicar tópicamente sobre la piel para obtener protección antioxidante.

Además, es un humectante eficaz y suaviza la piel, al mismo tiempo que ofrece cualidades antiinflamatorias, antimicrobianas, cicatrizantes y nutritivas.

El aceite de granada regenera y repara la piel y reduce y previene eficazmente las arrugas de la epidermis.

Aceite de granada versus extracto de granada

El aceite de granada proviene de las semillas, no es grasoso y se absorbe casi instantáneamente en la piel.

El aceite también ayuda a prevenir la pérdida de agua mientras se protege contra el daño de los radicales libres de los rayos UV. El aceite de semilla de granada tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir el enrojecimiento o la irritación en la superficie de la piel debido al acné u otros daños; esta propiedad del aceite lo hace útil para reducir cicatrices, imperfecciones, manchas oscuras, manchas de la edad y otras hiperpigmentaciones en la piel.

El extracto de raíz de granada funciona de manera similar, pero se dirige específicamente a la piel envejecida porque inhibe las metaloproteinasas de matriz, que son enzimas que descomponen el colágeno en la piel.

El extracto de granada es especialmente efectivo para mantener la piel hidratada y suave al reducir la pérdida de agua transepidérmica, lo que ayuda a retener la humedad a niveles más profundos, combatiendo la piel seca. También ayudan a suavizar la piel eliminando las células muertas que puedan estar en la superficie.

Beneficios del Aceite de Granada sobre la piel

1. Es rico en antioxidantes y polifenoles que le otorgan al aceite cualidades protectoras naturales, previniendo los daños ocasionados por los rayos UV y los radicales libres.
2. Apoya la regeneración celular. El aceite de granada regenera y repara la piel, además de reducir y prevenir eficazmente las arrugas de la epidermis.
3. Tiene propiedades antimicrobianas.
4. Es un eficaz agente antiinflamatorio.
5. Tiene una capacidad humectante superior, nutre y suaviza la piel.

BIBLIOGRAFÍA

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