¿Qué es la dermatitis? Descubre todo lo que necesitas saber
La dermatitis se refiere a varias inflamaciones e irritaciones de la piel que ocurren tanto en niños como en adultos. La inflamación puede ser de naturaleza atópica, de contacto o seborreica, pero también puede incluir afecciones leves como la caspa.
En algunas ocasiones, como sucede con la dermatitis de pañal, se singulariza por el enrojecimiento de la piel en una zona especifica del cuerpo como es la zona del pañal. En este aspecto, el uso de una buena crema de pañal puede ayudar a hidratar la zona y mantenerla lejos de la humedad mejorando su aspecto.
Otras alteraciones involucran ampollas o brotes que se asemejan al acné.
Debido a que la mayoría de los tipos de dermatitis tienen una apariencia distintiva, a menudo se pueden diagnosticar con base en un examen físico, aunque a veces es necesario realizar otras pruebas, como una prueba de parche para determinar si un alérgeno específico es el culpable de la dermatitis.
Tabla de contenidos
Dermatitis atópica: qué es
La dermatitis atópica, o eczema, generalmente ocurre en los niños como una erupción seca y escamosa en la cara y aparece dentro del primer año de vida. La dermatitis atópica habitualmente es el resultado de una reacción alérgica.
La erupción puede aparecer repentinamente, por lo general produce picazón, puede supurar líquido y, a menudo, dificulta el sueño. No obstante, en personas susceptibles puede aparecer incluso sin la exposición a ningún alérgeno en particular.
En niños mayores de 2 años, la dermatitis atópica puede aparecer en los pliegues de los codos y las rodillas, en el cuello o las muñecas, o entre las nalgas o las piernas. En estos niños mayores, la piel puede oscurecerse, volverse irregular o correosa.
La dermatitis atópica es rara en adultos; sin embargo, cuando ocurre, puede cubrir una gran parte del cuerpo, lo que provoca una picazón constante y una piel seca y escamosa.
Dermatitis de contacto: qué es
La dermatitis de contacto ocurre como una reacción a un alérgeno o irritante, como ciertos jabones, solventes, productos químicos, joyas o plantas como la hiedra venenosa y el roble venenoso.
Los síntomas de la dermatitis de contacto incluyen picazón, erupciones, ampollas y bultos en un área del cuerpo que estuvo en contacto con el alérgeno o el irritante.
La reacción puede retrasarse en algunas partes del cuerpo que recibieron contacto, puede no aparecer en otras e incluso podría viajar a otras partes del cuerpo si se ingiere a través de alimentos, medicamentos u otros medios.
Dermatitis seborreica: qué es
La dermatitis seborreica es más común en personas que tienen la piel o el cabello que es naturalmente graso y se presenta como un sarpullido rojizo, grasoso e hinchado que tiene una costra blanca o amarillenta en la superficie.
La caspa es considerada como una forma leve de dermatitis seborreica. Cuando se trata de los bebés, también se conoce como dermatitis seborreica infantil o costra láctea.
Esta forma de dermatitis tiende a estallar durante los meses de invierno, pero también puede ser causada por el estrés.
Otras clases de dermatitis
Estrictamente hablando, casi cualquier erupción podría considerarse dermatitis. Sin embargo, los dermatólogos generalmente usan este término para varias afecciones específicas de la piel.
La dermatitis por estasis es el resultado de una circulación deficiente en los tobillos y la parte inferior de las piernas, lo que hace que la piel de estas áreas se seque, pique, se descame y se decolore. La dermatitis severa por estasis puede provocar complicaciones como grietas en la piel que supuran llagas o una infección llamada celulitis.
La dermatitis del pañal es una afección común de la infancia caracterizada por una erupción roja en la parte inferior del bebé y la piel cercana causada por la exposición prolongada a un pañal mojado y/o sucio.
La dermatitis dishidrótica (pompholyx) afecta las palmas de las manos, los costados de los dedos, las plantas de los pies y el área entre los dedos. Empieza como una erupción creada por pequeñas ampollas que pican y que, en algunas ocasiones, se convierten en manchas escamosas. Esta erupción puede provocar que la piel se agriete y ser dolorosa. Los brotes tienden a repetirse.
La dermatitis numular también se conoce como eccema numular o eccema discoide. Esta condición aparece como parches en forma de moneda, rojos, escamosos y que pican en cualquier parte del cuerpo. Las posibles causas incluyen una reacción alérgica, como una quemadura o una picadura de insecto.
La dermatitis por autosensibilización se caracteriza por ampollas llenas de agua que pican y que se desarrollan en respuesta a un proceso inflamatorio intenso en otra parte del cuerpo, como una infección por hongos.
La dermatitis perioral es una erupción causada por una variedad de desencadenantes, incluidos irritantes y/o alérgenos. Habitualmente, perjudica la piel que se encuentra alrededor de la boca y, a veces, puede ser confundido con un brote de acné. En muchas ocasiones, la causa nunca se identifica.
Cómo cuidar la piel con dermatitis
En casi todos los tipos de dermatitis, el tratamiento es el mismo. Las formas leves se pueden tratar con humectantes y cremas que contengan esteroides.
Algunos aceites vegetales como el aceite de caléndula, el hidrolato de manzanilla o el aceite de neem, en caso del cuero cabelludo graso, pueden proporcionar alivio y mejorar la condición en los casos más leves.
Las personas con dermatitis de contacto deben identificar qué sustancias están causando una reacción alérgica. Se pueden recomendar cambios en el estilo de vida para las personas con dermatitis causada por el estrés.
Algunos tipos de dermatitis requieren un tratamiento específico. Por ejemplo, un champú anticaspa puede ayudar a eliminar la dermatitis seborreica.
La dermatitis del pañal a menudo se puede aliviar con cambios de pañales más frecuentes y una capa generosa de crema para pañales para crear una barrera entre la piel y la humedad del bebé.
También es importante evitar los alérgenos o el contacto con irritantes conocidos para evitar la recurrencia de la dermatitis.
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