Ácido salicílico: ¿qué es?

El ácido salicílico es un beta-hidroxiácido (BHA) que ayuda a promover el proceso de exfoliación natural de la piel. En los cosméticos naturales y ecológicos el ácido salicílico utilizado se deriva de la corteza de ciertas plantas, como el sauce blanco y la hoja de gaulteria, no obstante, el cosméticos comerciales el ácido salicílico se crea con mayor frecuencia en un laboratorio.

Este ingrediente se ha utilizado durante mucho tiempo para tratar diversos problemas, como la piel áspera y llena de baches (también conocida como queratosis pilaris), los poros obstruidos y afecciones de la piel como la psoriasis o para la elaboración de productos para la piel grasa.

Cuando se utiliza como parte del régimen de cuidado de la piel, las propiedades exfoliantes suaves, pero efectivas de este ingrediente pueden ayudar a que la piel se sienta más suave y tersa.

Comienzos del ácido salicílico

El descubrimiento del ácido salicílico se remonta a 1838, cuando fue preparado por primera vez por un químico italiano llamado Raffaele Piria. El ácido salicílico ayuda a exfoliar la piel al disminuir el “adhesivo” que mantiene unidas las células de la piel.

Esto apoya el desprendimiento natural de células muertas, lo que ayuda a eliminar la piel opaca o áspera para revelar una tez fresca y saludable.

El ácido salicílico es un ingrediente “soluble en lípidos”, lo que significa que puede penetrar eficazmente en los poros. Esto lo hace especialmente útil para pieles grasas y propensas al acné (particularmente para aquellas con “comedones abiertos”, también conocidos como puntos negros) porque ayuda a destapar los poros y mantenerlos libres de residuos que causan el acné.

Los beneficios de la exfoliación suave del ácido salicílico pueden ayudar a mejorar el aspecto de la piel áspera y llena de baches, que se conoce formalmente como queratosis pilaris y puede parecerse a la “piel de pollo” o la “piel de fresa”. También puede ser beneficioso para quienes padecen psoriasis al reducir la descamación y ayudar a prevenir nuevos brotes.

¿Es seguro el ácido salicílico?

El ácido salicílico es el beta-hidroxiácido más utilizado en los productos para el cuidado de la piel. Por lo general, se considera una opción más suave en comparación con otros hidroxiácidos, como el ácido glicólico.

Aunque varios tipos de piel pueden beneficiarse del ácido salicílico, está especialmente indicado para pieles grasas o propensas al acné debido a su capacidad para ayudar a controlar el exceso de producción de grasa y mejorar la apariencia de los poros obstruidos, la falta de brillo y los puntos negros.

También se puede usar para ayudar a suavizar la apariencia de la psoriasis, así como la piel áspera y llena de baches.

Precauciones con el uso de ácido salicílico

La protección solar diaria es una parte esencial de cualquier rutina de cuidado de la piel efectiva y especialmente importante cuando incluye salicílico en su rutina de cuidado de la piel.

Debido a su efecto exfoliante, puede dejar la piel más vulnerable a los daños UV por eso se recomienda utilizar medidas adicionales contra la radiación solar cuando se utiliza ácido salicílico.

El ácido salicílico generalmente se considera un ingrediente adecuado para el uso diario y, cuando se aplica correctamente, se puede usar en combinación con otros ingredientes para el cuidado de la piel.

La frecuencia con la que se puede utilizar ácido salicílico de manera segura depende, en gran medida, de los productos que se eligen, tipo de piel, los objetivos actuales de cuidado de la piel y el porcentaje de ácido salicílico incluido en la fórmula.

Hay muchos productos para el cuidado de la piel que contienen ácido salicílico que están especialmente formulados para ser lo suficientemente suaves para el uso diario. Los productos de ácido salicílico utilizan ingredientes como la niacinamida calmante, el ácido hialurónico hidratante y las ceramidas para respaldar un enfoque integral para una piel de aspecto saludable, sin alterar la barrera de la piel como el fluido hidratante día y noche menta de Logona.

¿En qué se diferencia el ácido salicílico del ácido láctico y glicólico?

Aunque los ácidos salicílico, láctico y glicólico se clasifican como hidroxiácidos comunes utilizados en el cuidado de la piel, hay algunas distinciones clave que se deben tener en cuenta.

El ácido salicílico es lo que se conoce como beta-hidroxiácido (BHA). Alternativamente, el ácido glicólico y el ácido láctico entran en la categoría de alfa-hidroxiácidos (AHA). Estos tres ingredientes funcionan de manera similar a los exfoliantes químicos, ayudando a promover la exfoliación de la piel y eliminando la acumulación de células muertas de la piel.

Sin embargo, su principal diferencia está en su solubilidad. Debido a que el ácido salicílico es “soluble en lípidos”, a diferencia del ácido glicólico y láctico, puede penetrar los poros obstruidos, lo que es especialmente beneficioso para las personas con piel grasa.